Existen varias malas prácticas con las que el mercado puede castigar a una empresa. Estas pueden tener un impacto negativo en la reputación de la empresa, en la relación con los clientes y en su éxito a largo plazo. A continuación, te mencionaré algunas de estas malas prácticas:
CALIDAD DEFICIENTE DEL PRODUCTO O SERVICIO: uno de los riesgos legales más altos a los que se expone toda actividad económica. El estatuto del consumidor ley 1480 de 2011 en Colombia lo define como “la obligación que tiene todo productor de asegurar en cuanto a la idoneidad y seguridad todos los bienes y servicios que ofrezca o ponga en el mercado, así como la calidad ofrecida”. Ten en cuenta que podemos hablar de una calidad deficiente del producto o servicio cuando existe una falta de cumplimiento de los estándares legales y expectativas establecidos por los clientes o por la industria en general. ósea que el producto o servicio no cumple con los requisitos de calidad esperados, ya sea en términos de funcionamiento, durabilidad, seguridad, eficiencia, apariencia, satisfacción del cliente u otros atributos relevantes.
Algunas características de falta de calidad en un producto o servicio pueden incluir:
- Fallas o defectos de los productos o servicios comercializados.
- Incumplimiento de especificaciones y requisitos establecidos. productoque no se ajusta a los estándares de calidad definidos por la empresa, la industria o los organismos reguladores.
- Problemas de seguridad que puede poner en riesgo la seguridad de los usuarios o consumidores.
- No brindar garantía legal, sobre el producto.
Toda empresa debe hacerse responsable de que el producto o servicio que ofrece sea de la mejor calidad; como proveedores o productores y es ahí donde es mas alto el riesgo legal, pues, la ley en Colombia nos exige altos estándares en cuanto a la calidad de el producto se refiere, incluyendo esto, la obligación de brindar siempre la garantía en todos los productos; La sanciones determinadas por la ley 1480 de 2011 llegan hasta los 2000 mil salarios mínimos legales vigentes y/o el cierre parcial o total del establecimiento incluyendo sea este en línea.
Recordemos que los clientes al experimentar insatisfacción en la adquisición del producto o servicio pueden disminuir la confianza en la marca.
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ENGAÑO O PUBLICIDAD ENGAÑOSA: La práctica de publicidad engañosa es una de las acciones más comunes por las que son sancionados los negocios en línea. El proveedor, engaña a los consumidores a través de afirmaciones falsas sobre las características o beneficios del producto o promociones engañosas, con el objetivo de vender dicho producto o servicio que no se ajusta a lo ofertado, violando así la confianza del consumidor y del mercado, perjudicando gravemente la reputación de la empresa, elevando el riesgo legal y económico a causa de las sanciones impuestas por las SIC.
En Colombia la ley 1480 de 2011 es la norma que regula estas malas prácticas comerciales, norma más conocida como el Estatuto del consumidor. Acá algunas de las acciones que en Colombia se considera publicidad engañosa y pueden incluir:
- Afirmaciones falsas sobre las características o beneficios del producto: Si una empresa hace afirmaciones falsas sobre las características o beneficios de un producto con el fin de atraer a los consumidores, se considera engañosa. Por ejemplo, afirmar que un producto tiene propiedades curativas sin tener evidencia científica para respaldarlo.
- Manipulación de información: Ocultar o manipular información relevante sobre un producto o servicio también se considera engaño. Por ejemplo, omitir información importante sobre efectos secundarios de un medicamento o proporcionar información engañosa sobre los términos y condiciones de una oferta.
- Comparaciones desleales: Por ejemplo, exagerar las ventajas de un producto en comparación con los competidores sin pruebas sólidas.
- Testimonios o reseñas falsas: Publicar testimonios o reseñas falsas en línea con el objetivo de influir en la percepción de los consumidores también se considera una práctica engañosa. Esto puede incluir pagar a personas para que emitan opiniones falsas positivas sobre un producto o servicio.
- Ofertas engañosas: Por ejemplo, anunciar un descuento significativo en un producto, pero aumentar previamente su precio para que el descuento no sea real.
- Etiquetas engañosas: Utilizar etiquetas o logotipos que sugieren que un producto es ecológico o sostenible sin proporcionar información clara sobre sus verdaderos impactos ambientales. Esto puede confundir a los consumidores y hacer que elijan productos creyendo que son más respetuosos con el medio ambiente de lo que realmente son.
- Afirmaciones vagas o exageradas: Hacer declaraciones genéricas o exageradas sobre las prácticas ambientales de la empresa sin proporcionar datos o evidencia concreta que respalde esas afirmaciones. Esto puede incluir frases como “amigable con el medio ambiente”, “eco-friendly” o “100% sostenible” sin una base sólida que respalde esas afirmaciones.
- Desviar la atención: Centrarse en un aspecto ambiental positivo mientras se ignora o se oculta información sobre otros impactos negativos. Por ejemplo, una empresa puede enfocarse en la reducción del uso de energía, pero omitir información sobre sus emisiones contaminantes o su uso insostenible de recursos naturales.
- Comparaciones engañosas: Hacer comparaciones con productos o prácticas menos sostenibles para que los productos de la empresa parezcan más respetuosos con el medio ambiente de lo que realmente son. Esto puede llevar a una percepción errónea de la empresa y sus productos en relación con la competencia.
Estas malas prácticas de engaño pueden resultar en serias consecuencias legales para las empresas que lleven a cabo estas malas prácticas, incluyendo multas, demandas de los consumidores por daños que pueden llegar a incluir la salud de estos y multas de hasta 2000 mil salarios mínimos legales vigentes en Colombia. Es por esto, por lo que se torna vital que los como publicistas, diseñadores, emprendedores y todo aquel que su actividad comercial implique la promoción y venta de un producto o servicio debe tener presente estos límites éticos al momento de comercializar su servicio. Que las empresas sean transparentes y honestas en su comunicación con los consumidores, es un punto clave en la disminución del riesgo legal, pues evitar cualquier forma de engaño o publicidad engañosa, hablar con la claridad y verdad acerca de nuestros productos es la mejor como estrategia para mantener la confianza del mercado y construir relaciones sólidas con sus clientes, disminuir el riesgo legal, económico entre otras consecuencias. Cuando una empresa engaña a los consumidores a través de afirmaciones falsas, descripciones o promociones engañosas, se socava la confianza del mercado. Estas más las practicas solo generan pérdida, pues hace que nuestros los clientes eviten la empresa y opten por la competencia.
INCUMPLIMIENTO DE PROMESAS O CONTRATOS: ocurre cuando una empresa no cumple con las promesas realizadas por medio de actos publicitarios a los usuarios y clientes que posteriormente no cumple, incumpliendo así los términos y condiciones establecidos en los contratos o acuerdos con los clientes, proveedores u otras partes de la cadena comercial. Estas malas prácticas comerciales, conlleva a consecuencias que inequívocamente son sancionadas por la Super intendencia de Industria y comercia de Colombia. Elevando el riesgo legal y financiero en la organización, pues no acatar la premisa principal de todo comerciante de la buena fe es altamente sancionado.
Toda empresa debe hacerse responsable de que el producto o servicio que ofrece y una de las maneras de lograrlo es cumplir totalmente con las promesas realizadas en publicidad, los términos y condiciones de la prestación de sus servicios en línea, además de todos los contratos o acuerdos o publicidad suscrito o publicada. Ten presente que caso de cualquier problema o imposibilidad de cumplimiento, es importante comunicarse de manera transparente, clara, oportuna, eficaz al usuario, pues esta es una de las principales obligaciones que la normanos impone al comercio en línea.
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PRÁCTICAS LABORALES INJUSTAS O ABUSIVAS: Las prácticas laborales injustas o abusivas se refieren a situaciones en las que las empresas adoptan políticas, acciones que imponen a sus trabajadores condiciones para laborar que disminuyen o violan los derechos de los estos, incumpliendo con los estándares mínimos establecidos por las leyes laborales y los convenios internacionales. En Colombia las normas laborales son muy proteccionistas. Aún cuando nuestros empleados desarrollen sus actividades de manera remota, el código sustantivo de el trabajo, ley 1221 de 2008, entre otras determina las maneras correctas en que podemos desarrollar estas relaciones laborales con nuestros empleados en línea.
A continuación, se presentan algunos ejemplos de prácticas laborales injustas o abusivas:
- Salarios injustos: Pagar salarios por debajo del salario mínimo legal o no proporcionar aumentos salariales justos y equitativos puede considerarse una práctica laboral injusta. Situación que da lugar a conflictos laborales y demandas legales.
- Condiciones de trabajo inseguras: No proporcionar un entorno de trabajo seguro y saludable para los empleados es una práctica laboral abusiva. la falta de medidas de seguridad adecuadas, equipos de protección personal insuficientes, falta de capacitación en seguridad y ausencia de protocolos para abordar los riesgos laborales. condiciones que ponen en peligro la salud y seguridad de los trabajadores, aumentando el riesgo legal por sanciones y pérdida de reputación.
- Discriminación: La discriminación en el lugar de trabajo, ya sea basada en la raza, género, religión, orientación sexual, discapacidad u otras características protegidas, es una práctica laboral injusta y abusiva. Negar oportunidades de empleo, promoción o trato equitativo a los empleados debido a su pertenencia a un grupo protegido puede resultar en demandas legales y dañar la reputación de la empresa.
- Exceso de horas de trabajo: Obligar a los empleados a trabajar horas excesivas sin la compensación adecuada, no respetar la ley de desconexión laboral en el caso de los empleados en línea, es considerado una práctica laboral injusta. Excesos que pueden repercutir en problemas de salud y bienestar de los empleados, hecho que es muy comúnmente demandable, pues la pérdida de capacidad laboral es uno de los temas más sensibles en materia de contratación laboral se trata.
- Represalias y acoso: Tomar represalias contra los empleados que denuncian prácticas injustas, así como el acoso en el lugar de trabajo, son ejemplos de prácticas laborales abusivas. Estas acciones pueden generar un ambiente de trabajo tóxico y tener un impacto negativo en la moral y la productividad de los empleados.
Las prácticas laborales injustas o abusivas las podemos prevenir, creando la consciencia sobre importancia de crear ambientes éticos laborales que toda organización debe desarrollar. Un mal ecosistema laboral, es un alto factor de riesgo legal, pues puede llegar a afectar a los empleados incluso hasta en su salud, llegando esto a poder costar onerosas sumas por indemnizaciones. Es fundamental que las empresas promuevan un entorno laboral justo, respeten los derechos de los empleados y cumplan con las leyes laborales y los estándares internacionales para evitar estos riesgos y proteger su reputación y estabilidad.
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IMPACTO AMBIENTAL NEGATIVO: EN la actualidad, las prácticas empresariales sostenibles y respetuosas con el medio ambiente son cada vez más importantes para los consumidores. Es por esto por lo que la mala práctica comercial denominada greenwashing la cual se refiere a la estrategia de marketing engañosa utilizada por algunas empresas para hacer que sus productos, servicios o prácticas parezcan más respetuosos con el medio ambiente de lo que realmente son. El greenwashing implica utilizar afirmaciones, etiquetas, logotipos u otras estrategias de comunicación que dan la impresión de que una empresa es ambientalmente responsable, aunque en realidad puede no estar tomando medidas significativas para reducir su impacto ambiental o cumplir con estándares sostenibles.
El greenwashing es perjudicial porque socava la confianza de los consumidores en las afirmaciones ambientales y puede desalentar la adopción de comportamientos y decisiones verdaderamente sostenibles. Además, puede distorsionar la competencia justa entre empresas que realmente se esfuerzan por ser sostenibles y respetuosas con el medio ambiente. Para evitar el greenwashing, es importante que las empresas sean transparentes en sus comunicaciones, respalden sus afirmaciones ambientales con datos y pruebas concretas, y se adhieran a estándares reconocidos de sostenibilidad. Además, los consumidores deben ser conscientes y críticos al evaluar las afirmaciones ambientales de las empresas, buscando evidencia y buscando certificaciones o sellos confiables que respalden las prácticas sostenibles.
